Salmo 137

¿Cuál es el salmo 137?

1 Junto a los ríos de Babilonia,

nos sentábamos a llorar,

acordándonos de Sión,

2 En los sauces de las orillas

teníamos colgadas nuestras cítaras.

3 Allí nuestros carceleros nos pedían cantos,

y nuestros opresores, alegría:

«¡Canten para nosotros un canto de Sión!».

4 ¿Cómo podíamos cantar un canto del Señor

en tierra extranjera?

5 Si me olvidara de ti, Jerusalén,

que se paralice mi mano derecha;

6 que la lengua se me pegue al paladar

si no me acordara de ti,

si no pusiera a Jerusalén

por encima de todas mis alegrías.

7 Recuerda, Señor, contra los edomitas,

el día de Jerusalén,

cuando ellos decían: «¡Arrásenla!

¡Arrasen hasta sus cimientos!».

8 ¡Ciudad de Babilonia, la devastadora,

feliz el que te devuelva el mal que nos hiciste!

9 ¡Feliz el que tome a tus hijos

y los estrelle contra las rocas.

Lamento de los cautivos en Babilonia

El salmo 137 expresa nuevas acciones y maneras de adorar a DIOS por medio de una vida agradecida a él y a sus acciones en medio del deseo que nace desde el corazón de las personas. Solo esto es lo que desea el Padre celestial, un corazón contristo y humillado, y de esta manera disponernos a recibir cada una de las bendiciones que están por venir. Si lo hacemos de esta manera no hay que dudar en que su poder actuará de manera irreductible en nuestras vidas, porque cuando el dispone algo, no hay nada que pueda que pueda resistirse para su cumplimiento.

Exilio de Babilonia

Una de las mejores acciones que la humanidad debe hacer a diario es agradecer al Padre celestial por su justicia, grandeza y misericordia en la vida de cada uno de sus hijos, por cuanto es el creador de todas las cosas y dispone de lo que hay en ellas. Que tremendo es comprender que cada una de las cosas creadas por DIOS tienen un propósito, como por ejemplo la acción del sol como elemento que sirve para alumbrar y dar calor a la raza humana y seres vivos en medio del frío, igualmente la luna como luz en medio de la obscuridad, y así podríamos seguir hablando del frío la lluvia y otros estados de la naturaleza en donde el Padre celestial expresa toda su soberanía a favor de cada uno de sus escogidos en el planeta tierra.

¿Qué expresa el salmo 137?

Cabe destacar que la humildad es una manera de vivir y además una condición de la cual el Padre celestial se vale para expresar su amor a cada uno de sus hijos, por lo que se cumple lo que dice su palabra en donde se expresa que el atiende a los humildes de cercas pero visualiza a los altivos de lejos. Esto claramente expresa que las personas altivas no tienen parte del reino de los cielos, por cuanto no han pasado a tener un corazón de carne, en medio de su indiferencia con sus cosas personales y las que suceden con el prójimo, sabiendo que somos llamados a velar por ayudar a los demás y demostrar el verdadero amor del Padre eterno sobre la humanidad.

El salmo 137 dice que en la inmensidad del amor de DIOS, el no desea nada que pueda destruir o causar cualquier daño a la tierra, pero la desobediencia de una generación que se ha apartado de sus principios eternos genera una actuación de tipo ofensiva en el Padre celestial que genera la implementación de su justicia divina en medio de la desobediencia a sus designios.

Cautivos de Babilonia

El pueblo de Israel fue un claro ejemplo de lo que tiene que ver con la actuación del Padre celestial en medio de la desobediencia, ya que a pesar de que el pueblo israelí era la tierra predilecta de DIOS en la que su hijo nacería, no hubo inclemencia a la hora de que estos mantenían una postura desobediente a cada uno de sus propósitos, por lo que esto nos llama a estar apercibidos y permitir su eterna voluntad en nosotros.

 


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