Para muchas personas, dejarlo todo y dedicarse de lleno a la Iglesia podría ser algo completamente descabellado. Sin embargo, esto fue exactamente lo que hizo la joven canadiense Libby Osgood. Quien es Ingeniera Aeroespacial y trabajó en la Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio, mejor conocida como la NASA. Si te interesa conocer su interesante historia, continúa leyendo.
Ingeniera de profesión
Osgood es una mujer de 34 años que desde muy pequeña sintió gran devoción por Dios. Sin embargo, decidió dedicarse a la ciencia porque la considera como una de sus pasiones. De hecho, no solo estudió para ser ingeniera, sino también expandió sus estudios realizando un doctorado en Ingeniería Mecánica y culminando un gran número de cursos en su área favorita.
A la edad de 23 años comenzó su camino en la NASA. Donde consiguió el cargo de ingeniera de sistemas. Allí empezó a darse cuenta de que no era muy fácil hablar sobre religión y profesar sus creencias. La joven expresó a CTV News: “creo que la mayoría de los científicos son ateos. Los que tienen fe son discretos al respecto”.
En el año 2010 regresa a Canadá y continúa trabajando en la NASA. Sin embargo, decidió emprender un nuevo camino en la educación. Esta vez como profesora de la Universidad de la Isla del Príncipe Eduardo. Ubicada en la ciudad de Charlottetown, Canadá. El aula de clases significó gran parte de su vida. Pero, para poder convertirse en novicia, se vio obligada en solicitar un período sabático.
Monja por devoción
En agosto del presente año tomó la decisión que marcó su vida. Ingresar a la casa de la Congregación de Notre Dame, ubicada en Nueva York, Estados Unidos, y emprender su camino como monja. Este cambio lo considera como uno de los más radicales que ha hecho. Sin embargo, expresó: “siento como si antes tenía piezas dispersas del rompecabezas. Ahora todas logran encajar”.
